martes, 7 de agosto de 2007

Descertificando el corazón


Cayó en mis manos (ojos?) un link con el título La Certificación más rápida en Internet, pintado como chiste. Le eché una ojeada y efectivamente me reí un poco (para los que no sepan inglés, o les de ladilla seguir el link, asuman que la página que sale dice algo como "Listo! Te certificaste! Viste que era rápido?"). Le dí click a Ver el Certificado y me salió una ominosa pantalla de error, lo cual me hizo reir más: "Cómo se nota que quien la hizo se certificó rápido" (el error es a propósito).

Luego seguí leyendo en la siguiente página, y la sonrisa se mantuvo, pero no por el chiste, sino por estar de acuerdo con el texto: Las certificaciones apestan.

Nadie se certifica sentado, leyendo libros, o en un curso... Bueno, sí se certifica, comprobado. Digamos que nadie debería poder certificarse sentado, leyendo libros, o en un curso. Para poder certificarte deberías haber logrado dominar las habilidades necesarias, y eso no lo obtienes sentado, leyendo libros, o en un curso: Necesitas sentarte, pero a practicar y a ganar experiencia. Los libros y los cursos pueden ser una ayuda a ello, no un medio.

Sencillamente, ningún recién graduado, del área que sea, debería ser capaz de certificarse en nada (excepciones aplican, como en todo, pero han de ser eso: excepciones. Y no hablo de punteros nulos, y cosas así). Las empresas que exijan certificaciones deberían saber primero, lo que eso significa hoy en día, y segundo, lo que queremos que signifique.

Aquellos que aprueben la certificación deberían ser la crema. Ser los que saben. Ser aquellos a los que los demás acudan en busca de respuestas. Ser los oráculos. Debería haber una clara, obvia, inmensa diferencia entre aquel que logró certificarse, y aquel que no lo logró. Este es el primer error.

Deberíamos hablar de descertificación. Vemos la certificación como algo que todos deberían tener, y ya esa frase aclara que no sirve. La gente debería fallar la certificación. Es más, la mayoría de la gente (quizás) debería fallar la certificación. Eso es lo que demostraría que la certificación certifica algo, que es difícil de lograr. Y eso nos lleva al segundo error.

Aquellos que fallen la certificación -los descertificados- deberían ser vistos no como los que no son útiles para el mercado, no como los que no sirven, sino como lo que realmente serían: aquellos que no lograron saltar lo bastante alto para certificarse. No tener la certificación -peor aún, fallarla- no quiere decir que no sirvas! Solo significa que aún te falta camino por recorrer para alcanzar ese escalafón (escalafón que ahora sí significaría algo).

Hay muchos otros puntos a tomar en cuenta: Que la certificación debería ser temporal, dado que al cabo de cierto tiempo ya no significará que sabemos nada, a menos que nos hayamos mantenido practicando. Que la certificación (al menos como existe hoy en día) no debería ser garantía de nada, y no debe suplir o sobrepasar en importancia otros puntos a tener en cuenta al contratar a alguien. Que deberíamos dar más importancia a las certificaciones basadas en habilidad (las que casi nadie saca, las que menos conocen) que a aquellas basadas en conocimiento (la aplastante mayoría, las que todos tenemos)... Pero baste lo escrito hasta ahora para llamar a reflexión.

Yo? Aún no sé si me quedaré así, o si trataré de sacar alguna certificación basada en habilidad. Solo sé que sé lo que sé. Y que lo demuestro a diario con acciones.


El talento acierta en un blanco al que más nadie puede pegar; el genio acierta en un blanco al que más nadie puede ver. -- Arthur Schopenhauer

El conocimiento es un arma. Mi intención es estar armado formidablemente. -- Richard Cypher, The Lord Rahl

La confianza es brindada más frecuentemente por la ignorancia que por el conocimiento. -- Charles Darwin

Es indiscutible que la mayoría de los profesores enseñan como fueron enseñados, no como fueron enseñados a enseñar.

Lo que llaman talento no es más que un arduo y continuo trabajo realizado correctamente. -- Winlow Hemer

La acción es la mejor respuesta.

Cuando os licenciéis seréis máquinas de matar, ministros de la muerte. Hasta entonces, sois una puñetera mierda! -- Full Metal Jacket

3 comentarios:

Jeanfreddy Gutiérrez dijo...

Pues me sorprende eso de la certificación de habilidades. Yo pasé por la Academia CISCO y me hago una idea bastante cercana de los que dices. Todos quieren "el papelito" para poder entender protocolos, palabras claves y formas de negocio. A eso apuntan.

Anónimo dijo...

Cuando se ponen los tiempos difíciles y buscas trabajo (incluso en otras áreas) y, el we que te entrevista al ver tu solicitud o currículum te dice: “Ud. Esta sobre calificado” para el puesto que estamos solicitando, no lo podemos contratar, (jeje y eso que no estoy titulado ni certificado). Te ven con cara que les costaras $$$.$$. Mediocres rellenando puestos con perfiles limitados?
Saludos!

Miguel, el cachorro. dijo...

En la materia que curso las habilidades son importantes pero tambien los conocimientos. De hecho aquel que tiene mas conocimientos es el mejor... pero a veces es necesario como buscar esos conocimientos que nadie mas sabe donde esta. Ahi tenemos las habilidades que hacen al genio...