martes, 21 de octubre de 2008

Segundos


La gota permitió que el aire por el que se desplazaba le diera forma mientras caía a unirse con sus hermanas, formando grandes masas de agua que ahogaron el pavimento, y mojaron el metal, el vidrio, la carne y los demás materiales con los que se consiguió en su camino.

La goma unió cada una de sus caras, vuelta a vuelta, con el asfalto, separando los mares de agua con surcos de una vida abismalmente corta. Mares infinitamente mayores y menores a muchas otras cosas se crearon, separaron, juntaron y movieron, sus olas y ondas creando patrones irrepetibles.

El agua conoció de nuevo lo que era surcar los aires, pero esta vez no en forma de solitaria gota, sino de ola monstruosa, en la que multitud de gotas de mezclaban y entretejían, tocándose, fundiéndose, dejando de ser ellas y pasando a ser otras, en un ciclo sin fin.

El vidrio y el metal no lograron detener el flujo del líquido, y una vez superada la barrera que podría haber protegido la piel y los tejidos, el agua se abalanzó en su interior, deslizándose sobre todo lo que se encontró, y dentro de los elementos permeables que consiguió.

Las terminales nerviosas, al detectar la humedad que entró en contacto con sus sensores, dispararon millones de avisos que recorrieron los laberínticos caminos hasta llegar a la central nerviosa del ser en el que se encontraban. Desde ahí, infinitas respuestas se crearon, generando respuestas en músculos desconocidos.

Las cuerdas vocales se movieron y generaron ondas sonoras, que viajaron por el aire, chocando con más gotas, vidrio, metal y goma, hasta -quizás- llegar a los tímpanos que realmente eran su destino. Nunca se sabrá si los alcanzaron o no. Y eso nada cambia.

* * *

El otro carro pasó al lado del nuestro, y el agua que salpicó entró por la ventanilla, empapándome.

- Coño, desgraciado! -grité!


shhh
mi pequeña
shhh
juguemos
simplemente juguemos
a nunca callar nuestra voz

-- nada en especial (Paisajes ilusivos)

Pequeñas cosas, en las que aquí no me fijo, hicieron de mi estancia algo magnífico. Fui espectadora de excepción de algunas vidas, luchadoras, maleadas a base de esfuerzo, truncadas a base de decepciones, pero resurgentes como Fénix de las mismas cenizas que crearon las lágrimas. (...) Mirarlo todo y descubrir ínfimos detalles. Llenar los ojos de hermosos gestos. -- unachicaenapuros (14/01/06)

Cosas como salir con alguien casado, o con quien no debes salir; engañar a tu pareja, robar o engañar... Todas esas cosas, a lo mejor pequeñas, pero que te dan trauma. -- Gorka

1 comentario:

algo para mostrar dijo...

A veces, cuando vas de malo, te ocurren cosas malas, ley del karma.