jueves, 23 de febrero de 2006

Ellos III


Vivimos en paz, alegres, compartiendo lo que la naturaleza nos brinda. Trabajamos la tierra para ganarnos el alimento. Somos felices. Pero todo es un engaño. Yo, observador astuto pensativo, lo sé. Ellos nos vigilan de lejos.

Ellos están justo donde la vista no alcanza. No entiendo como los demás no se han dado cuenta de que existen, de que nos vigilan. Ellos siempre andan ahí, ocultos, solo visibles con el rabillo del ojo cuando giras de improviso y levantas tu cara al cielo. Yo, cauto veloz pendiente, lo sé.

Ellos se alimentan de nosotros.

Cada vez que le comento mis temores a los demás, se ríen de mí... Dicen que estoy loco, que sencillamente no puedo ser feliz y disfrutar de una vida perfecta. Se carcajean de mis miedos, y me dicen que busque pareja, que salga con los amigos. No sé cómo podría pensar en salir y divertirme luego de saber lo que yo, conocedor investigador curioso, sé.

Hace algún tiempo, Ellos se llevaron a uno de mis mejores amigos. Lo sé porque yo, valiente explorador cuidadoso, me quedé fuera de casa cuando cayó la noche. Lo ví venir hacia casa, caminando tranquilamente y sin sospechar nada. Y en ese momento, ví a uno de Ellos. Un ojo brillante como el sol apuntó hacia mi amigo. Una mano gigante bajó hacia él. Sonido de huesos rotos. Un hilillo de sangre en el polvo del piso. La mano se alejó, cuello roto colgando, con su presa en ella.

Desde entonces, las pesadillas han sido mis más fieles compañeras nocturnas: No ha habido noche en que no se presentaran, y siempre me despierto, ya en pie, gritando a todo pulmón. Los demás han comenzado a alejarse de mí. Dicen que yo, loco perdido peligroso, ya no tengo salvación. Que dejé que la imaginación me venciera, que la cordura me abandonara.

Desde hace días no sé lo que es dormir bien. Cada noche tiemblo al pensar que Ellos vienen, y que hoy yo seré su escogido, por alguna razón misteriosa que nunca entenderé. Cada sombra es un escondite para uno de Ellos.

Pero no. Hoy no me esconderé. Si he de morir, al menos elegiré el momento. Hoy, aunque me cueste la vida, los enfrentaré. Ya no soporto vivir con este miedo. Hoy yo, plumas pico patas, seré libre.

* * *

- ¡Amooor! Ya maté al pollo para la cena. Este ni corrió. Te lo dejo en el fregadero. ¿Algo más?

- Sí, vida. ¿Podrías ayudarme con la ensalada?

* * *

Vivimos en paz, alegres, compartiendo lo que la naturaleza nos brinda. Enraizados en la tierra que nos brinda el alimento. Somos felices. Pero todo es un engaño. Yo, observador hojas verdes, lo sé. Ellos nos vigilan de lejos.


Nacimos para crear y creer, porque sólo así crearemos una realidad en la que siempre creeremos. -- Jeca

Queda prohibido no crear tu historia. -- Pablo Neruda

Qué le hiciste al gato? Se ve medio muerto!. -- La esposa de Schroedinger

No me voy a molestar en hacer cosas. Me siento y hago que se hagan. Entérate de que cualquiera puede hacer cosas, si se toma el tiempo y la molestia suficientes; pero no cualquiera puede, como yo, hacer que las cosas se hagan ellas mismas. -- Mother Carey

Si quieres ser escritor, lo primero es hacer dos cosas: leer mucho y escribir mucho… Si no tienes tiempo de leer es que tampoco tienes tiempo ni herramientas para escribir. Así de sencillo. -- Stephen King

La mayoría de las personas te contarán una historia directa y verdadera. No será complicada, pero tampoco será interesante. -- Ed Bloom

lunes, 13 de febrero de 2006

Decepciones

Al parecer, en esta vida las Decepciones están a la vuelta de la esquina. Las Decepciones nuestras a nosotros, de los demás a nosotros, de los demás a los demás, y de nosotros a los demás. Para todos hay, no se peleen. Es más, no hagan fila. Y menos detrás de una flaca y una gordita.

La más normal de las Decepciones es la Decepción que nos hacen los demás, que es más o menos lo mismo que la Decepción de los demás a los demás. Es sencillo: tenemos un concepto de alguien, o una opinión de alguien, o un sentir hacia alguien, o un ideal de alguien. Y, en algún momento, por culpa de ese alguien, o de otro alguien que quizás no es nadie, o de la vida misma, esa opinión y ese sentir se nos hace añicos. El pedestal en el que está la persona descubre ser de barro, y se desmorona sin que podamos hacer nada por evitarlo.

La vida nos enseña que, cuando eso pasa, nos engañaron. Nos mintieron. Nos vendieron algo que no era cierto. Nos enamoraron y se aprovecharon de ello. No?

Bueno, sí. A veces. Es que hay gente perra. O gente con miedo a que los demás lleguen a conocer a su verdadero yo. Es gente que promete incumplibles, ya sea para engañar, ya sea para tratar de no defraudar. El resultado casi siempre es el mismo: Decepción.

Sean sinceros siempre. No teman en mostrarse.

Pero otras veces -creo que la mayoría- somos nosotros mismos los que nos engañamos. Somos nosotros los que montamos -a la fuerza incluso- al pobre individuo en el pedestal, donde queda en precario equilibrio, a la vista de todos, y con cara de desubicada vergüenza. Somos nosotros los que exigimos al niño que apruebe, al novio que esté a la altura, a la hija que no sea puta, al viejo que entienda... Nosotros, que muchas veces no somos capaces de lo mismo.

Quién soy yo para juzgarte?

Por qué ponemos en pedestales a la gente? Buscamos un sentir de seguridad que realmente no existe? Nos estamos dando a nosotros mismos razones para amar a la persona? Reflejamos en ella los aspectos positivos que desearíamos que tuviera? Aguas, gente, y traten de evitarlo. Pues el resultado siempre es el mismo: El pobre se cae y se escoñeta, y tú te Decepcionas.

Quieran a la gente por lo que son, no por lo que quieran que sea. Quieran a esa mujer con todo y su histeria, y a ese carajo con todo y sus amigotes. O no lo hagan... Pero no se quejen, sea la decisión que tomen. Recuerden que es preferible que nos odiemos por lo que somos, a que nos amemos por lo que no.

Si la Decepción que nos hacen los demás duele, la Decepción que nos hacemos a nosotros mismos es insoportable. Gracias a Dios que es bastante más difícil de lograr, al menos para la mayoría de las personas. Como dijo el poeta Henry Wadsworth Longfellow: "Nosotros nos juzgamos por lo que nos sentimos capaces de hacer, mientras que los demás nos juzgan por lo que ya hemos hecho".

Sin embargo, existen personas incapaces de no Decepcionarse de ellas mismas. Son las personas que viven en el pasado (ojo, que no es lo mismo a vivir recordándolo, o incluso añorándolo). Son las personas que no ven sus logros, que no se fijan metas, que no disfrutan al lograr un éxito. Son, en resumen, las personas que no han logrado aceptarse a ellos mismos.

He cometido errores, como no. Muchos. Y de muchos me he dado cuenta tardísimo. Pero creo que no me he Decepcionado de mí mismo, al menos aún. Tal vez sea que hago llaves para las puertas que consigo en mi camino. Tal vez sea que me caigo y me escoñeto, pero me levanto. Tal vez sea que soy un tonto, y no me he dado cuenta de que sí apesto. Pero el caso es que no me siento Decepcionado de mí. Y tal vez sea por ello que para mí, la Decepción más dolorosa es la que les hacemos a los demás.

Quizás sea solo una forma de Decepción de tí a tí (no Decepcionas al otro, pero sientes que lo Has Decepcionado, por lo que te Decepcionas... En fin, me entienden, verdad?) pero para mí se sienten distinto. Y, como todo, la Decepción es grande según no lo que hayas hecho o dejado de hacer, sino según lo que creas que la otra persona siente a ese respecto.

Mucha gente se ha quejado de que no aviso a nadie cuando se me muere un ser querido. A veces pienso que es el colmo que se quejen de que no corrí la voz: "Épale! Qué más? Sabes, se murió mi abuela". Pero el caso es que, tratando de ganarme mi punto de Sabiduría, basta con ponerte del lado de ellos: Sí, a mí me gustaría estar allí cuando me necesites. Una vez más, soy yo el que me Decepciono de mí mismo por no haber estado a tu lado, por haber dejado que la vida me separara tanto como para no enterarme. Pero tratemos de no regañar al inocente...

También se han quejado por no haberles avisado del Bautizo de Asier (sí, lo bauticé. Si estás en el grupo que no lo sabías, adelante: Decepciónate). Y en este particular, tal vez por que la persona que lo dijo me importa mucho, sí me dolió el reclamo. Y una vez más, uno se Decepciona de uno mismo. A pesar de haber tomado una decisión, a pesar de saber que no había otro camino, uno se Decepciona. Que firmes son nuestras convicciones, no?

Cuánto daño puede hacer una palabra dicha... Cuánto daño puede evitar una palabra dicha...

Cuántas veces les han dicho "me partiste el corazón"? "No me esperaba eso de tí"? "Pensé que nuestra amistad estaba en otro plano"? "Todos mienten"? "Creí que luego de lo compartido, tendríamos la suficiente confianza"? Y, aunque solo sean palabras nacidas de un tipo molesto o de una chama "en esos días", el caso es que llegan, pues las están diciendo gente importante, gente con derechos sobre tí, gente a la que amas (si no, no se podrían Decepcionar, cierto?).

Quizás sólo sean tonterías. Pero, como lo dije al principio, las tonterías no tienen el peso que les demos, sino el que la otra persona sienta que tienen. Si hubiese sabido lo fácil que es causar dolor a la gente, hubiera andado con más cuidado... Pero el caso es que no aprendemos, y seguimos causando malestares sin darnos cuenta.

Deseo estar en la lista de personas a la que llames cuando te sientes mal. Deseo que sepas que puedes contar conmigo. Deseo que pienses en mí, que sepas que tienes un hombro, y más, en mí. Deseo que más nunca necesites decir "Me Decepcionas". Y deseo, por sobre todas las cosas, poder cumplir todos estos deseos.

Pido disculpas, a quien las quiera aceptar, o necesite escucharlas, por todas las Decepciones que pueda haber causado. Soy humano -sorpresa!- y cometo errores. Y por la cantidad y calidad de los que cometo, creo que soy más humano que la media. Lo más que puedo prometer es tratar de notar y pensar y sentir más de ahora en adelante, para tratar de no volver a errar tanto. Espero que aún haya amor para que me perdonen.

Traten de ir por la vida con los ojos y el corazón abiertos. Quizás los Decepciones más así, pero seguro que Decepcionarán menos a los demás y a ustedes mismos... Y que amarán más. Creo que, al final, eso es lo importante. Así pues, gente, tengo mi corazón abierto: Los invito a Decepcionarme, pero tengo el firme propósito de no dejar que lo logren, y de no lograrlo yo. Deséenme suerte.


Cierro con las frases de costumbre, y con un deseo: Espero que disfruten todos sus días de San Valentín, estén acompañados o no...

Decisiones, Cada dia, Alguien pierde alguien gana, Ave María
Decisiones, Todo cuesta, Salgan y hagan sus apuestas, Ciudadanía

-- Rubén Blades (Decisiones)

Pray for daylight, Pray for morning,
Pray for an end to our Deception...

-- The Crüxshadows (Deception)

Es mejor perderse que nunca embarcar. -- Diego Torres (Color Esperanza)

La vida es una obra de teatro con un reparto deplorable. -- Oscar Wilde

Mi amigo el Barman me hizo mal: Por tí me vino a preguntar. -- Jeremías (Desde el Bar)

Will You Be My Valentine? (Quieres ser mi Valentín?)

miércoles, 8 de febrero de 2006

Las Arenas del Tiempo


I

Por qué las ciruelas negras son rojas cuando están verdes?

hmmm... No fué la manera en la que pensé que comenzaría el escrito. Sí era algo sobre cuando estamos verdes, pero me fuí por la tangente. Es que a veces los escritos ganan el derecho a la vida propia...

Escribir para mí es fácil. Claro, puede ayudar el hecho de que escribo puras sandeces idiotas sin sentido ni estilo. O, hablando más en serio, que sencillamente escribo lo que me nace escribir. Y mira por dónde, que algunas personas tienen el buen gusto de mentirme diciendo que les gustó. Gracias!

Normalmente cuando leo una frase que me marca, o pasa un acontecimiento digno de mención, o algún director de renombre me pide que escriba un guión para su próxima película, anoto la idea en mi archivito de ideas, no sea cosa de que se me olvide en algún momento desde que llegó a mí, hasta que logre que llegue aquí.

Sin embargo, si quiero que me sigan jalando para que escriba un libro (si alguien sabe cómo puedo publicar algo, avísenme. Aunque ya me ocuparon el título - bien ocupado, lo reconozco - del Sexo Sentido) tengo que esforzarme un poco para que los demás encuentren medianamente interesante lo que escribo. Es cierto que es mi Blog, y que si me da por ahí puedo postear lo que me provoque, pero entonces no me visitarán, y no podré hacerme millonario cobrando los ads publicitarios, o vivir de lo que mis asiduos lectores me donen. O nadie se enterará de cuando pida dinero para no comerme un conejo.

Y no se crean, que ya el vicio del Blog me hace falta! Necesito los aplausos de mis fans... Y hasta mal se sintió cuando una me recordó que la he tenido olvidada. Pues bien, este Blog va para ella (si me sale fatal, Dany, perdóname!). El caso es que a veces la vida se interpone entre uno y su Blog. La vida, dándote más material para escribir, pero dejándote menos Tiempo para hacerlo.

Ah! Ya! El Tiempo! A eso venía...

(hmmm... He notado que el Tiempo es, más o menos, una constante en mis escritos. Tengo que aprender a manejarlo, o comenzaré a escribir cada vez lo mismo. Todo el Tiempo lo mismo... LOL Trataré de quemar todos mis cartuchos aquí).


II

Cosa curiosa, el Tiempo, no? De pequeños, siempre estamos deseando crecer, y de grandes, luego de que ha pasado el Tiempo, siempre deseando ser pequeños. Recuerdo a mi mamá diciéndome esto mismo hace diez o quince años (o veinte! Cómo pasa el Tiempo!), y yo, con la seguridad de un infante-adolescente de que se conoce todo el mundo, pensando "hmmm... No, no debe ser así". Pero -sorpresa!- sí lo es.

Todos pasamos por un período de formación en el que la plastilina que somos se va endureciendo y va forjando nuestro carácter, nuestra identidad. La adultez es un glaciar que va rodeando en silencio a la juventud. Cuando llega, la juventud se congela, capturándonos en la imagen de nuestro último acto, en la pose en la que estábamos cuando el hielo nos atrapó.

Poco a poco nos vamos volviendo más nosotros mismos, encerrando más y más en lo que tenemos, y con miedo a experimentar más. Como dijo un buen amigo, "viviendo la libertad tras un cristal antibalas". Nos volvemos menos aventureros, y más rutinarios. Menos eshu, y más halfling. Y llega el momento en que cualquier nueva aventura que emprendamos no será más que una pálida campaña para tratar de olvidar lo que hubo antes.

Y así sucede. De repente, un día te das cuenta de que eres adulto, y que la vida dejó ya de ser sencilla, y que sin previo aviso vas en cuenta regresiva. De repente, tu vida está patas arriba. Ya no tienes todo el mundo para comértelo, sino que ahora él te come a tí. Dejas de jugar y ver tele, y comienzas a preocuparte por el trabajo y la reproducción.

Y no es que todo pase de golpe, sino que somos lentos y nos damos cuenta luego de medio camino recorrido...

Algún día, por los pasillos en los que aprendimos a caminar, pasarán nuevos niños aprendiendo a caminar. Esos niños nos mantendrán tan ocupados que no nos daremos cuenta del mundo exterior. Pero nos harán recordar el Tiempo pasado desde que nosotros recorrimos esos pasillos, y nos llenarán de nostalgia al ver que ya no somos protagonistas de la historia.


III

El Tiempo pasa, y los mundos divergen. "Las arenas del Tiempo hacen dar una vuelta más al reloj del mundo, volviendo estraños a los amigos". Me gustaría ver a mi gente antes de que un accidente los separe para siempre de mi lado. En accidentes también entra el Tiempo.

El Tiempo nos cambia hasta el corazón. Cuando uno es joven, se enamora hasta del gato: La profe, la compañera, la vecina, la panadera (uf! que morbo!). Uno se enamora, y piensa que la vida le ha cambiado, que eres el único que consiguió a la persona, y que será para siempre... Hasta que la siguiente persona la saca. Y ya de mayor, el Tiempo mete y saca gente del corazón como si fuera derecho único de él... Pero a otro ritmo.

Cuando eres joven, declararte es un logro! Luego de meses, agarras valor, y le diriges la palabra. Te tiemblan las piernas, se te caen las orejas, te desmayas... Tratas de acercarte a esa persona: abandonas a los demás, es más, ni los ves. Cuando creces (supongo, pues aún no he crecido), tener sexo es lo más normal del mundo, sin complicaciones. En algún lado leí que sabes que te estás haciendo viejo si logras declinar una invitación a sexo sin sentirte mal, si eres hombre, o aceptarla tranquilamente, si eres mujer.

Puedes tú hacer una lista completísima de la gente de la que te has enamorado? Seguro que no. Y de la gente a la que has querido o valorado? Seguro que menos. Aunque probablemente recuerdes los Top Ochos. Las personas especiales. Sabes qué les ha pasado? Sabes cómo sienten ahora? Sabes qué les quita el sueño?

Debo seguir siendo joven... Aún me enamoro de todo el mundo. A lo mejor es que ya descubrí que todo el mundo tiene méritos para enamorar a alguien. O a lo mejor es que, sencillamente, aún no logro enterarme de que hay cosas que se acaban, Tiempos que pasan.


IV

Aquí cierro, espero que por algún Tiempo, mi desahogo hacia el Tiempo. Por ahí viene (quizás) un escrito sobre la forma en la que las personas vivimos nuestra vida, pero la Vida y el Tiempo son dos cosas distintas, por mucho que insistan en abrazarse.

Bueno, poco más que decir. En el blog viejo, luego de múltiples peticiones, me las arreglé para subir algunas foticos de Asier, para que vayan viendo cómo va creciendo a medida que le pasa el Tiempo. Y aproveché para subir una representación visual bidimensional de mi yoidad, por si a alguien le interesaba. Me lo pensé mucho, pues ahora notarán que soy feo y dejarán de soñar con intensas conversaciones nocturnas conmigo... Pero ni modo. Súfranme. El caso es que aún no sé si las suba aquí; se escuchan peticiones.

Besos a todos...


Estuve tentado de cerrar con un escrito que tengo escondido por ahí, pero mejor no. Quien lo quiera, que lo busque (un premio a quien lo encuentre). Cerraré con las frases de costumbre.


No deberíamos obligar a los niños a irse a la cama temprano. Después de todo, al despertar serán un día más viejos. -- Finding Neverland

Time is getting colder; And I'm getting older, older. Where is the face that I knew before? (El Tiempo está haciéndose más frío; y yo me estoy haciendo más viejo, viejo. Dónde está la cara que conocía antes?) -- Milla Jovovich (Clock)

La juventud es una lista de enormes espectativas que nunca han de cumplirse del todo. -- Rafael Cabrices (La radio de la madrugada)

What do I see? I see time as it affects all things. Human flesh whithers and dies before my eyes. Flowers bloom, only to fade. Trees drop green leaves, never to regain them. In my sight, it is always winter, always night (Qué veo? Veo el Tiempo afectando todas las cosas. La carne humana envejece y muere ante mis ojos. Flores florecen, solo para decaer. Los árboles dejan caer hojas verdes, para nunca volverlas a tener. En mi vista, siempre es invierno, siempre es noche). -- Raistlin Majere (Dragons of Winter Night)

Tú también podrás hacer cosas de las que te arrepentirás el resto de tu vida. -- Lua

Life can only be understood backwards; but it must be lived forwards (La vida solo puede ser entendida de atrás hacia adelante; pero debe ser vivida de adelante hacia atrás). -- Soren Kierkegaard

You've got to live with yourself / For the rest of you life (Tienes que vivir contigo / Por el resto de tu vida) -- Duran Duran (Who do you think you are)

domingo, 22 de enero de 2006

Mi última charla


Escribí este artículo hace algún tiempo, y fué originalmente publicado el 13 de Septiembre del 2004 en OcioJoven. Varias personas me han comentado que me leen en un lado, y se olvidan de leerme en otro, por lo que crucé ciertos artículos, para que estén en ambos. Este fué uno de los afortunados...

* * *

Por favor, no discutan sobre la "veracidad" de lo que escribí. Es un artículo, quizás con mi opinión, quizás sólo con ficción. Léanlo como eso, y evitemos enfrentamientos religiosos, que nadie podrá ganar.

* * *

Nunca fui particularmente religioso. Creía en Dios más por no discutir que por otra cosa. Fui Católico porque mis padres así lo decidieron, mas no porque yo hubiera dado alguna vez algún paso en esa dirección.

Con esto no quiero decir que fuera una mala persona. De hecho, creo que más bien fui todo lo contrario: nunca dañé a nadie (al menos de forma consciente), siempre respeté y amé a los demás, ayudaba a quien me rodeaba cada vez que podía, y no sólo por lo que pudiera recibir a cambio. En resumen, creo que no fui una persona "mala"... Y menos al compararme con otras personas que llegué a conocer mientras viví.

Por mi educación, siempre "creí" en el Cielo, con sus nubes y sus angelitos, y el Infierno, con su fuego y sus castigos. Nunca me pregunté qué habría más allá... Hasta que lo descubrí. Y dado que siempre fui pragmático, cuando estaba en mi lecho de muerte y me ofrecieron traer a alguien que pudiera limpiarme de mis pecados, decidí que debía importar más los hechos de mi vida entera que una confesión hecha durante su conclusión; que no tenía sentido que alguien "malo" pudiera confesarse cinco minutos antes de morir, y por ello ir al Cielo, ni que alguien "bueno" muriera sin poder confesarse, y por ello ir al Infierno. Decidí, pues, que dejaría que mis actos hablaran por mí.

Es por eso que llegué al Infierno.

He de reconocer que en ese momento es que me di verdadera cuenta de que algo andaba mal. Me encontraba en un lugar nuboso, indistinto. Si tuviera que ponerle un nombre al mismo, le hubiera llamado Cielo en vez de Infierno, pues lo que el catecismo y las películas muestran del primero era más parecido al lugar donde me encontraba. Cierto es que las nubes eran cálidas, pero su calor no resultaba desagradable.

Mientras aún pensaba en a dónde había ido a parar, y si en verdad sería merecedor del Cielo (eso, aparte de ser excelente por todo lo que significaba, tenía además el agregado de que demostraba que mi teoría sobre las confesiones había estado acertada), una sombra se dibujó ante mí. La figura que salía lentamente de entre las nubes resultó el ser más hermoso que pudiera haberme imaginado durante toda mi vida, y aún me quedaba corto.

La figura era la de un ángel: un joven de rasgos muy finos y cabellos negros larguísimo. Una armadura dorada cubría sus ropajes, túnicas blancas que tapaban casi toda su piel. Su rasgo más notorio eran unas grandísimas alas negras, de plumas de águila, a juzgar por su tamaño, y de cuervo, a juzgar por su color. Su triste sonrisa, prometedora de paciencia y amor, se disolvió cuando abrió su boca para hablarme.

- Bienvenido al Infierno. Puedes llamarme Lucifer.

En nada se parecía aquél ser al Diablo de mi religión, al Demonio de las películas, al Señor de las Tinieblas Dantescas. ¿Y los cuernos y la cola? Y, puestos a ello, tampoco en nada se parecía ese lugar al Infierno. ¿Qué pasó con el fuego? ¿Y los gritos?

Lucifer debió darse cuenta de mi asombro, o leyó mi mente, o sencillamente ya estaba acostumbrado luego de la infinidad de almas que con seguridad habían estado allí, con esa misma expresión, antes que yo.

- Ya es un poco tarde para el aviso, pero la verdad es que no deberías creer en todo lo que lees o ves... - dijo, con voz pausada y ojos húmedos - Sobre todo cuando lees o ves algo que trata de explicar lo que nadie nunca ha visto.

- Pero - respondí tartamudeando -, ¿no está todo eso sacado de la Biblia?

- La Biblia no es más que una biblioteca de muchos libros, todos ellos escritos por muchos hombres, y traducidos incontables veces. Mucha gente defiende que, al ser la palabra de Dios, él ha podido hacer que permanezca inalterada a través de los tiempos. Pero basta ver dos ediciones cualesquiera de la Biblia para darte cuenta de las diferencias que contienen... En cada una de sus traducciones, algo ha sido cambiado y perdido, ya sea por ignorancia del traductor, o por intención de modificar su contenido - replicó él, con tranquilidad.

Ante mi muda mirada de asombro, fruto de sus palabras, y de la identidad de quien las profería, prosiguió.

- Mi Padre dotó a todos los seres con inteligencia, sentimiento, voluntad... Alma, en una palabra. Y por ello, cualquier humano puede haber escrito o borrado de la Biblia lo que creyera adecuado en un momento dado. Mi Padre sugiere - dijo, haciendo énfasis en la última palabra -, pero no obliga. Lo que debe entender el ser humano de la Biblia, de la Religión, es el Contenido, no la Forma... "Amarse los unos a los otros" es la única frase importante escrita en cualquier libro terrenal.

- Si los seres humanos se dieran cuenta de esto, menos problemas habrían - repuse, con sorna. ¿Qué hacía el Diablo, hablándome de tú a tú, y dándome lecciones del amor?

- Y menos guerras. No sabes el dolor que me causa escuchar a los humanos pelear porque la Biblia dice que las mujeres no deben usar pantalones. Si se pararan a pensar que, en la época en la que se escribió la Biblia, ni siquiera existían pantalones que prohibir... Más aún, aunque los hubieran, ¿qué importa ello? ¿Qué importa que la Religión haya prohibido comer pescado? ¿No notan que era sólo una manera de evitar que la gente se enfermara al comer carne pescada hace mucho tiempo, a muchos kilómetros de distancia?

Sin embargo, nada de esto escuché. Una frase dicha por Lucifer se había quedado rebotando en mi cerebro.

- ¿Dolor? ¿Te causa dolor las peleas en la tierra? Disculpa, pero... ¿No eres el Diablo?

- Sí, lo soy. Y, si sabes eso, entonces debes saber que soy su hijo predilecto, aquél que más lo ama. Como te dije antes, no creas todo lo que leas o veas. Soy un ángel; un ángel que ama tanto a su Padre, que acepté la misión más difícil de todas. Acepté venir aquí, acepté encargarme del Infierno, acepté representar lo malo y ser odiado por todos. Más aún, acepté no volver a ver nunca más la cara de mi Padre, aquello a lo que más amaba. - hubiera jurado que vi una lágrima resbalar por su mejilla - Y todo eso lo acepté en nombre de lo mucho que lo amo.

Aquello fue la gota que derramó el vaso. Alguien una vez me contó un chiste donde decía que el Infierno y el Cielo eran similares, y que la única diferencia era que el Cielo tenía un mejor publicista. Siempre me hizo gracia pensar en el Cielo como en un club social de entrada selecta, y en el Infierno como un bar donde siempre estaba prendida una fiesta.

Pero esto, sencillamente, no lo podía aceptar.

- ¿El Diablo, bueno? ¿El Diablo, amando a Dios? ¿Pero y todo lo que nos han enseñado? ¿Todas las escrituras? ¿Toda la dicotomía entre el bien y el mal?

- No me malinterpretes. El Bien existe, y por contraposición, el Mal. La capacidad de ambos está en el ser humano, por igual. ¿Nunca llegaste a pensar en por qué mi Padre no me eliminó, sencillamente? Me amaba, sí, pero también amaba a muchas personas sobre las que abatió plagas y desastres en algún momento. También ama al niño que deja sin madre a temprana edad. Mi Padre, si la situación fuera como la creen los humanos, podría sencillamente haber destruido a Adán y a Eva cuando pecaron, y haber hecho una nueva creación. El Mal no es el enemigo de mi Padre; es sólo otra faceta de su creación más grande, el ser humano.

- Mi Padre - prosiguió luego de un momento - podría acabar con todo el mal de la creación con sólo desearlo. Pero no quiere que la creación sea modelada por él, sino por los humanos. Y han sido los humanos quienes han creado el concepto del Bien y del Mal, y quienes los han modificado con el paso de las generaciones.

- Pero, y entonces, ¿a qué la necesidad de ti?

- ¿No te has dado cuenta? - dijo, sonriendo como un padre le sonríe a un hijo mientras le explica algo obvio que el niño no termina de entender - Hay mucha gente que se llena la boca diciendo que son ateos, que no creen en mi Padre. Sin embargo, todos creen en mí. Y, como podrás notar si lo piensas un momento, quien cree en mí, debe creer en él. Soy necesario, puesto que alabo la gloria de mi Padre.

Tardé un minuto en cerrar la boca, debido al impacto.

- ¿Pero entonces, nada de lo que damos por supuesto, nada de aquello en lo que basamos nuestras creencias, ninguno de nuestros dogmas, es real?

- Nunca pienses eso. Mi Padre es real, y el amor que siente por todos nosotros es real. Y yo soy real, y mi labor también lo es. La única diferencia es, puedes creerme - dijo, mientras su voz se cascaba en un sollozo -, que lamento con todo el corazón que estés aquí...

Su figura se envolvió otra vez en nubes, sin darme oportunidad de decir nada más. La última mirada con que me regaló, una mirada llena de compasión y dolor, se perdió en la oscuridad. Ésa es la última mirada que he visto desde entonces, aquí, en mi Infierno.


Lo único que se quema en el Infierno es la parte de tí que no soltó la vida, tus memorias, tus ataduras. Ellos queman todo eso. Pero no te están castigando. Ellos están liberando tu alma. Por ello, si estás asustado de morir y... y estás aferrándote, verás demonios arrancándote la vida a tiras. Pero si has hecho las paces contigo, entonces los demonios son realmente ángeles, liberándote de la tierra. -- La escalera de Jacob

miércoles, 18 de enero de 2006

Comentarios a HeroClix


¿Eres fanático de los Cómics? ¿O acaso te fascinan los juegos coleccionables? ¿Te encantan los juegos de estrategia? ¿O sólo buscas pasar un buen rato con tus amigos? Si contestaste "sí" a alguna de las preguntas anteriores (o a todas, como yo) entonces, por favor, no sigas leyendo este artículo. No quiero que me culpes a mí cuando gastes todo tu dinero en HeroClix.

Los juegos coleccionables de miniaturas (CMG, por Collectionable Miniature Game) no son una novedad, ni mucho menos. Ya han pasado sus buenos años desde la primera vez que escuché hablar de Space Hulk, Necromunda o Warhammer 40K, por decir algunos. Sin embargo, no por ello han pasado de moda, o han perdido empuje entre sus adeptos, sean experimentados o novatos.

Desde hace poco, los CMG han tenido un repunte: al menos cuatro nuevos juegos (hay más, pero son cuatro los que me han llamado la atención) han surgido en estos últimos años para placer de sus fanáticos: Mage Knight, HeroClix, MechWarrior y Lord of the Rings. Si bien todos ellos tienen sus puntos fuertes (y todos ellos son excelentes para jugar, como ya he podido comprobar), centraré este artículo en el juego que me llamó la atención tanto como para permitirle comerse mis ahorros: HeroClix.

En resumidas cuentas, HeroClix es un juego de estrategia de miniaturas basado en el universo del cómic de Marvel, DC y los así llamados "cómics independientes" (Dark Horse Comics, Danger Girl, Top Cow, etc). A grandes rasgos, la tónica del juego es (como es de suponer) Jugador 1 vs Jugador 2, y el que quede parado (o gane más puntos por matar personajes del contrario) gana. Sin embargo, existe la posibilidad de jugar "escenarios", que le añadan una nueva dimensión al juego sin aumentar su dificultad (por ejemplo, definiendo que no gana quien tenga más puntos, sino el que capture cierto artefacto).

El juego en sí tiene muchas reglas, pero son de fácil aprendizaje. En dos o tres partidas ya las estarás dominando (excepto los poderes de cada figura, pero eso se arregla teniendo a mano alguna de las tablas de referencia).

Se juega sobre mapas, lo que elimina el tener que estar tomando medidas o armando escenarios. A algunos jugadores esto no les gustará, pero para otros debe ser muy cómodo no tener que armar un diorama cada vez que se va a jugar. Respecto a la variedad de mapas, no es restrictiva, pues aunque no hay muchos en el mercado, en la red puedes encontrar verdaderas obras de arte que puedes bajarte e imprimir.

En general, se nota que se ha tratado de simplificar todo lo posible, sin que por ello se pierda la emoción y la estrategia del juego. Conozco amigos que juegan HeroClix con su hijo de 10 años, y eso es gracias a que la simplificación de las reglas deja paso a pura estrategia, sin necesidad de perder tiempo y ambiente sacando cuentas raras, o discutiendo de si la figura A ve a la figura B o no.

Para terminar de convertir a los aún no conversos, les diré que una de las características que más me llama la atención de HeroClix es la mezcla de universos. Desde mis tiempos de OverPower me encantó poder jugar no sólo con los personajes de Marvel, sino además poder mezclarlos con los de DC o Image y otras casas de "cómics independientes" (aunque Image nunca llegó a Venezuela: Idea de regalo para mí!). ¡Imagínense poder armar con total libertad los "Dream Teams" de los cómics!

Como único apartado negativo puedo citar que las figuras de HeroClix están aceptablemente pintadas, pero sólo eso (aunque cada vez quedan mejor). Mientras que hay algunas muy bien detalladas, hay otras en las que se nota la prisa y la desgana del pintor (hay que ver las miniaturas de Mage Knight o Lord of the Rings para disfrutar ante una miniatura bien pintada. ¡Algunas son sencillamente asombrosas!). Sin embargo, nada que no puedas arreglar, si eres exigente, pintándola por tí mismo.

En conclusión, para no hacer larga una historia corta, les recomiendo que le den una oportunidad a la nueva generación de CMGs. Y de ellos, les recomiendo comenzar con HeroClix... ¡Aunque no les prometo que luego se puedan salir!

Heroclix - Gamezone (en español)

Heroclix - Wikipedia (en español)


(Publicado originalmente en OcioJoven el 18 de Enero de 2005).

Hawkgirl: (viendo una de las armas de Lex Luthor) Qué es eso?
Batman: Rompible, espero.

Batman: Has pensado en todo.
Alternate Batman: No - Solo en todo lo que alguna vez llegarás a pensar.

Batman: Cómo podemos pararlos?
Superman: Tú eres el inteligente - piensa en cómo.